No
digas nada, quiero enredar mis dedos en tu cabello, jugar a enmarañarte
como cuando niña , el trigal mecido por un brisa imaginaria acompañàndo
mi caricia. Recuestaste en mi hombro, recuerdame en el gesto el perfume
de tu cercanía. Ven, dame tu mano aprieta con sentimiento, no habrá más
seguridad del otro lado. No quiero un final, quiero el reinicio
esperado, porque permites que el tiempo nos aleje otra vez. Aquí estoy,
como siempre, no olvides el amor, eso no es lo que muere. Mueren las
personas en vida cuando no alimentan y no se alimentan de tan valioso
sentimiento. No hay quien te ame más que yo, Aún no has descubierto quien soy.......
Yuli (Septiembre '12)
Dulce, íntimo, bello.
ResponderEliminarreferido a un afecto muy cercano e incompredido.
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